viernes, 4 de febrero de 2011

Llamar a las cosas por su nombre.


El cáncer es una enfermedad seria, como bien saben quienes lo han padecido o padecen. Pero eso no justifica que nos tengamos que referir a él como una larga y penosa enfermedad. Puede que este estigma tuviera cierta justificación en el pasado, pero ya es hora de que se elimine de esta palabra toda connotación de destrucción y negatividad. El presente es completamente distinto y el futuro muy esperanzador a pesar de que se acumularán los casos de cáncer en los próximos años, pero también lo harán los de las personas curadas.

Aunque no hay que levantar falsas expectativas ni bajar la guardia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario