Las noticias de que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, deja cutelarmente abiertas las urgencias nocturnas de una parte de los centros afectados por la decisión del Gobierno regional y la suspensión del euro por receta en la Comunidad de Madrid por el Tribunal Constitucional, demuestran que se toman medidas al revés del mundo, a la ligera, sin pensar que se pueden estar vulnerando los derechos de los ciudadanos y las medidas adoptadas pueden ser anticonstitucionales.
Si así fuese, se ahorrarían las quejas y trámites judiciales que al final vuelven a dejar las cosas tal y como estaban. Estamos en manos de políticos a los que les importa bien poco los intereses de los ciudadanos y tiene que ser un tribunal el que los frene.
Francamente lamentable.
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